Alzamiento de Prenda

El alzamiento de prenda es un trámite que se realiza al final del pago de un crédito o deuda para que este bien sea liberado y su propietario pueda venderlo legalmente. La Ley Nº20.855 regula el alzamiento de las prendas que garanticen créditos y entró en vigencia el día 23 de enero de 2016.

Alzamiento de prenda gratuito para el cliente

La Ley establece que una vez extinguida la deuda será obligación de Autofin el alzamiento de la prenda, por lo que será de su cargo y costo.

Se debe distinguir entre:

• Prenda específica: Aquella que garantiza una obligación determinada con el acreedor, es decir con Autofin.
• Plazo para alzar prenda específica: Extinguida la deuda, Autofin debe otorgar el alzamiento mediante la escritura pública o instrumento privado autorizado ante notario y protocolizado en la notaría, dentro de los 45 días siguientes de extinguidas totalmente la o las obligaciones garantizadas. Posteriormente, dentro de los 30 días siguientes de practicada la cancelación de la Prenda en el Registro Especial de Prendas, se comunicará al cliente que se ha otorgado instrumento de alzamiento y que el alzamiento ha sido practicado en el Registro mencionado.
• Prenda general: Aquella que garantiza todas las obligaciones que tenga con el acreedor, es decir con Autofin.
• Plazo para alzar prenda general: Extinguidas las deudas garantizadas con prenda, Autofin comunicará dicha situación al cliente, quien dentro de los 20 días siguientes podrá optar por alzar las garantías o mantenerlas.

En caso que decida alzar las garantías Autofin tendrá 45 días para otorgar el alzamiento e ingresar éste al Registro de Prendas sin Desplazamiento. Posteriormente, dentro de los 30 días siguientes de practicada la cancelación en el Registro Especial de Prendas, se comunicará al cliente que se ha otorgado instrumento de alzamiento y que el alzamiento ha sido practicado en el Registro mencionado.

La información será entregada al cliente vía correo electrónico, en el evento de contar con dicha dirección; o bien por correo convencional a la dirección indicada en el contrato, en el evento de no contar con dicha herramienta tecnológica. El cliente también podrá utilizar estos mismos medios de comunicación.